Impacto de las TIC´s en la sociedad

Si las personas anteriores a nosotros, vieran los adelantos tecnológicos actuales, creerían estar en un mundo de fantasía, ya que parece a veces difícil de creer para nosotros mismos, de las herramientas de las que hoy en día disponemos, y de un sinfín de maneras para utilizarles, mismo que muchas veces es un problema…

Casi olvido cuando de niño sólo veía la tv hasta quedarme bajo un profundo sueño, y ahora ha pasado a ser de lo menos utilizado por mí mismo, ya que en la computadora se encuentra todo. Desde niño, ya disponía de una, a causa de que mi hermana mayor la requería para su estudio, sus ejecutables de 8 bits y las gráficas de 40Mb, hacían poco apetecible para un niño el hecho de involucrarse en las computadoras, sin embargo ahora parecieran ser adictos al Facebook y otras redes sociales, claro ahora con grandes novedades como el Aero y sus parecidos y derivados programas, ya no es la misma interfaz gráfica prácticamente en escala de grises, eso ha convertido en los medios de comunicación pioneros a un segundo término por parte de las personas jóvenes.

En verdad es raro ver a una persona joven leyendo en el periódico, buscando en alguna parte distinta del clasificado o quizás sociales, y esto es por el hecho de que la información podemos alcanzarla literalmente “con tan sólo un click”.

Poderosos ordenadores han nacido, pero no sólo ése ámbito ha evolucionado, del año 2000 hacia acá, fue como destapar la champagne de la ciencia y la tecnología, muy en el pasado usaban “pies” humanos, para medir las distancias (bien sea a pasos), hoy en día cogemos un gps o el google maps y podrémos saber la distancia de aquí a Toluca, por lo cual se ha facilitado demasiado “vivir en nuestros tiempos”

Partiendo de que la tecnología es completamente neutra, y que por mucho presumir de Honda sus robots aún no pueden pensar por sí mismos, -nosotros sí- quienes le damos una utilidad a todos los inventos, y en caso de no existir, si tenemos la necesidad –lo inventamos- y si bien le sirve a alguien más, entonces se convierte en un gran invento, como el caso de Sony y su subdivisión Playstation, innovando al mercado con videojuegos no de niños, ahora para adultos, dejando atrás al fontanero de Miyamoto, ahora con compañías como Rockstar Games, es posible “entretener a los más grandes de la casa” además de a los niños, con un poco más de violencia, esto ha sido posible, si bien ha llegado hasta los videojuegos, dan escalofríos lo que es posible hacer negativamente con las TIC.

Pues bien, es posible ser bueno o malo, todo el tiempo ha sido así, y con sus respectivas consecuencias, el problema es que hoy en día, se encuentra una serie de información y una serie de herramientas hardware que pueden “llegar a manos equivocadas” y trayendo consigo el caos, no porque antes no pudiera caer en manos de un mal señor, una Colt 45, sino porque ahora hasta un niño puede llegar a causar un daño ocupando sólo las TICs de una manera nada benéfica, y si bien estoy aún –exagerando hasta ahora 16 de agosto de 2012- futuramente será posible ver problemáticas mucho mayores generadas al respecto.

Pues bien, el punto es la amoralidad que presenta la ciencia y la tecnología, es el mismo hombre y su materia gris, quién utiliza todo para beneficio o perjuicio suyo y de todos.
Pero siendo personas de bien, utilizando las TIC podrán no sólo mejorar su calidad de vida, sino poder aprender y dejar otro legado, la generación de nuestros abuelos fue en realidad la que hizo posible el internet, desde el Arpa net militar hasta lo que vemos ahora, y justo en este momento, es nuestro turno de dejarle algo al mundo, para como sociedad seguir avanzando, salvo que queramos ser como un animalito, cazando y comiendo hasta ser cazado –morir-

Sin dejar nada en sí para “ser recordados” ya existe un mayor campo para actuar y nos encontramos en mayor comodidad que nuestros abuelos -¿Por qué no inventar algo más grande?- Por supuesto que es posible, pero utilizando todo con juicio, para así poder traer algo extra a esta sociedad, y seguir disfrutando lo que ya está hecho.